Secciones
La Enciclopedia Británica (EB) define el fascismo como una filosofía de gobierno que enfatiza la primacía y la gloria del Estado, la obediencia incondicional a su líder, la subordinación de la voluntad individual a la autoridad estatal y la severa represión de la disidencia. Se celebran las virtudes marciales, mientras que se menosprecian los valores liberales y democráticos. El fascismo surgió durante las décadas de 1920 y 1930, en parte por temor al creciente poder de las clases trabajadoras; se diferenciaba del comunismo contemporáneo (tal como se practicaba bajo el régimen de Iósif Stalin) por su protección de las élites empresariales y terratenientes y la preservación de los sistemas de clases. Los líderes de los gobiernos fascistas de Italia (1922-1943), Alemania (1933-1945) y España (1939-1975) —Benito Mussolini, Adolf Hitler y Francisco Franco— fueron presentados ante sus públicos como la personificación de la fuerza y la determinación necesarias para rescatar a sus naciones del caos político y económico. Los fascistas japoneses… (1936-1945) fomentó la creencia en la singularidad del espíritu japonés y enseñó la subordinación al Estado y el sacrificio personal.
No creo que muchos cuestionen que las características del fascismo mencionadas anteriormente sean atributos prominentes de la administración Trump. ¿Y qué significará para el pueblo estadounidense estar bajo el fascismo? Significará vivir en una dictadura donde las leyes son inexistentes, donde los ricos dirigen el sistema para su propio beneficio y siempre se centran en atacar a un grupo específico de personas. En la Alemania nazi, fueron los judíos, los… Sigue leyendo
Caracas, 21 mar (Prensa Latina) El secuestro de 240 venezolanos en Estados Unidos y deportados de manera ilegal a El Salvador mantiene en vilo a igual número de familias, que hoy sufren las consecuencias y el dolor de la arbitrariedad.
José Medina vive en el sector La Vega, centro-oeste del Municipio Libertador, en Caracas, y es uno de los padres que tiene a su hijo joven en el Centro de Confinamiento del Terrorismo en tierras salvadoreñas.
“Me encuentro aquí en apoyo a los venezolanos que como padres estamos pasando lo mismo”, manifestó categórico a Prensa Latina en la Plaza Bolívar capitalina, donde cientos de compatriotas depositaban su firma en un libro en solidaridad con los connacionales presos.
Soy padre de Carlos José Medina que se encuentra en Estados Unidos hace dos años y el 14 de febrero fue a renovar el permiso y lo dejaron retenido “porque ellos dijeron que tenía tres tatuajes y se los mostrara, él los expuso -dos estrellas y una corona- y desde ese momento lo vincularon con el Tren de Aragua”, afirmó.
Con rostro compungido, el entrevistado aseguró que su hijo “no es delincuente, ni aquí, ni en ningún país” y refrendó que por donde pasó no ha tenido problemas con las leyes, “yo consigno la carta de no poseer antecedentes en Venezuela”, declaró.
Narró que el día que fue a renovar el permiso ante las autoridades migratorias estadounidenses su esposa lo acompañaba y “le colocaron un aparato en el pie, no puede salir de… Sigue leyendo